28.- Pronombres de Autoridad

Omno.- (nos).- Pronombre personal de primera persona del singular. Utilizado por Papas, Reyes y otras excelencias, para designarse a sí mismos.

Ejemplo: Omno, Yoca Acoro I, doe… (Nos, Juan Carlos I digo…)

29.- Pronombres Posesivos

Se utilizan para establecer una relación de posesión. Estos pronombres siempre tienen el mismo género y número que las personas que poseen las cosas a las que hace referencia, nunca de las cosas poseídas, y siempre se sitúan detrás éstas.

Ejemplo: Tar sosi odei oge (Esta es mi [hombre] madre)

Su significación es ocasional dependiendo de quién hable.

30.- Pronombres Indefinidos

Son aquellos que se refieren a los objetos o a los seres de una manera indeterminada, sustituyendo al adjetivo indefinido y al sustantivo que este modifica. Su significación es ocasional y no disponen de género ni en número.

Ejemplo: Sam (alguien, algún, alguno, alguna, algunos, algunas)

Sam menciso tavac (alguien compró [indefinido] tabaco)

Estos pronombres poseen las siguientes características.

Grados de indeterminación

Ejemplo: Nel (uno); Samno (ninguno, nadie); Sam (alguien, algún, alguno, alguna, algunos, algunas,); Same (alguien)…

Indican una cantidad global o parte de ella

Ejemplo: Evri (cada); Ayo (todo, toda, todos, todas); Nasti (nada); Nafa (ni un poco); Nasep (un poco); Fam (poco, poca, pocos, pocas); Nacosa (algo)…

Indican una cantidad no concreta, mayor o menor

Ejemplo: Masa (demasiado, demasiada, demasiados, demasiadas); Molto (mucho, mucha, muchos, muchas, muy); Mei (más); Mein (menos); Asez; (bastante); Ovide (tan, tanto, tanta, tantos, tantas)…

Locuciones cuantitativas

Son las que expresan una cantidad indeterminada de elementos con varias palabras.

Ejemplo: Ayo mondo (todo el mundo); A sofen o’ (a montón de)

31.- Pronombres Numerales

Expresan cantidades precisas, ordenes de colocación, distribuciones… Podemos distinguir varias clases de numerales: cardinales, ordinales, múltiplos, fraccionarios, distributivos, colectivos, agrupativos y temporales.

Los numerales se corresponden en la escritura en dos formas gramaticales, un signo lingüístico, del, (dos), y un signo aritmético, 2.

Cardinales

Constituyen la base de los nombres de los números enteros. Precisan la cantidad de objetos coincidentes con los números. Ninguno de ellos tiene distinción en género ni número

Ejemplo: Cel (cuatro); Nadel (doce)

Para hablar de un número en plural se antepondrá el artículo de presentación plural, pero el número seguirá invariable.

Ejemplo: Al jel (el ocho); Il jel (los ochos).

Escritura

Unidades, decenas, centenas, unidades, decenas y centenas de millar y unidades, decenas y centenas de millón, siempre utilizan las mismas consonantes, lo único que varía es la vocal.

e, Para los números básicos. (del 1 al 9)

a, Para las decenas

o, Para las centenas

i, Para indicar los millares, el punto de los miles

u, Para indicar los millones, el punto de millones

Todos los números acaban por la consonante, l, (ele).

Los números se componen, bien de una sola grafía, en cuyo caso esa única grafía ya acaba por ele.

Ejemplo: tel, (3); zal (50); cul (4.000.000)

O bien por la unión de varias grafías. En ese caso, todas las que se unen pierden la ele final excepto la última de ellas que la mantiene, considerando como la última la que está más a la derecha del número.

Ejemplo: Javel; (89); Dodatel (223)

El orden de escritura es de izquierda a derecha poniendo en sucesión las centenas, decenas y unidades, teniendo presente el tema de la ele final tratado anteriormente.

Ejemplo: 8 centenas = Jo; 4 decenas = Ca; 6 unidades = Sel. El número final seria 846, y su escritura, Jocasel.

Con las unidades, decenas y centenas de millar, el procedimiento es igual, excepto que siempre la última sílaba es, –nil, que indica que se trata de estas unidades, decenas y centenas.

Ejemplo: 6 centenas de millar = So; 1 decena de millar = Na; 9 unidades de millar = Ve; Más la indicación de cifras de millar, –nil. El número final seria, 619.000, y su escritura, Sonavenil.

En el caso de unir los dos ejemplos anteriores, obtendríamos el número, 619.846, y su escritura seria, Sonavenil jocasel.

En el caso de haber unidades, decenas y centenas de millón, el procedimiento es el mismo, tan solo teniendo presente que la sucesión debe de acabar por, –nul que indica los millones.

Los números siempre se separan en grupos de tres en tres, (unidades, decenas, centenas), indicando en cada caso a que rango pertenecen.

Ordinales

Indican la posición ocupada en una serie, tiene por tanto significación ocasional.

No tienen variación ni en género ni en número.

Se obtienen anteponiendo a los cardinales el prefijo,

Pri–; para los ordinales masculinos, femeninos, neutros, singular y plural, en todos los casos y supuestos.

Ejemplo: Prinel (primero); Pridazel (vigesimoquinta)

Si es necesario indicar un sexo en alguna ocasión en concreto, como se explica en esta misma gramática, se antepondrá el pronombre personal que nos interese en cada ocasión.

Cuando indican sucesiones de reyes o papas, siempre van pospuestos al nombre y representados por números romanos, aunque su lectura sigue realizándose como si estuvieran escritos de manera ordinal.

Ejemplo: Alue XV (Luís XV). Se leería; Alue Prinazel.

Múltiplos

Son aquellos que expresan una cantidad que cuenta cierto número de veces la unidad.

Se forman quitando la ele final a los números cardinales y añadiéndoles el sufijo, –vle. No admite variación en género pero sí en número.

Ejemplo: Devle (doble o duplicado); Jevle (óctuple o octuplicado); iDevle (dobles o duplicados)

Fraccionarios

Son los que expresan fracción o partición de una cantidad, de la unidad o de diversas unidades. No disponen de variación en género ni en número. Se forman quitando la ele final al número y añadiendo el sufijo, –ime.

Ejemplo: Neime (medio); ceime (la cuarta parte); Del naneime (dos onceavas partes)

Distributivos

Son los que indican que a cada uno le corresponde la misma cantidad de un todo o que lo que hay se distribuye en cantidades iguales para cada uno, ‘cada uno, uno’, 'uno para cada uno', ‘dos para cada uno’.

Ejemplo: Aferile epecsi nezui (cogieron [hombres] sendas espadas; cogieron una espada cada uno)

Puede darse el caso de que no sea, ‘uno para cada uno’, sino que se reparta un total en la proporción de cinco para cada uno, o veintitrés para cada uno. En este caso como también en el caso de uno para cada uno, la forma de realizar los números distributivos es, quitarle la ele final a la escritura del número cardinal y añadirle el sufijo, –zui.

Ejemplo: Caramel dezui mijine (dos caramelos para cada niño [hombre]); Caramel nadezui mijcini (doce caramelos para cada niña [mujer]); Caramel nezui mijino (un caramelo para cada niño [ambos sexos])

El número distributivo siempre se sitúa detrás del elemento a distribuir, y antes de quien recibe la distribución.

No admiten variación en género ni en número.

Colectivos

Sirve para determinar un número de elementos con una palabra en singular.

No tienen variación ni en número ni en género.

Se forman quitando la ele del final de la escritura de los números cardinales y añadiendo el sufijo, –sai.

Ejemplo: Desai (par); Nazesai (quincena); Casai (cuarentena)

Agrupativos

Son los que distribuyen un todo en grupos iguales. Puede servir para formar grupos, los cuales tengan cada uno el mismo número de elementos. Podría definirse como, Distribuir de “cantidad” en “cantidad”, (ejemplo: distribuiros de tres en tres).

Se forman añadiendo el prefijo, en–, a los números cardinales.

Ejemplo: ·Grupoto entel· (Agruparos [ambos sexos] de tres en tres); ·Aferutis endel· (cogerlo [mujeres] de dos en dos)