Sufridor empedernido

(Jotabém)

Cómo se ensaña la vida,
con quien no cierra su herida.

A su cuerpo, lo mutila,
sus pensamientos, trasquila,
su desgracia, no asimila,
su consuelo es el tequila.

Sin pecado concebido,
defraudado por cupido.

Con la esperanza perdida,
de tener vejez tranquila,
quisiera morir dormido.



Recontando

(Jotabém)


En la banqueta sentado
estaba un niño pasmado.

Miraba muy fijamente
respetando lo silente
con un dejo de inocente,
pero con temple valiente.

Inexplicable a sus años
que le sobren los tamaños.

Se notaba preocupado
del pasado, del presente
como recontando daños.