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Directorio de poetas que escriben en Rima Jotabé



Rima Jotabé



Directorio de poetas que escriben en Rima Jotabé en lenguas diferentes al Español

Directorio de Poetas que escriben en rima Jotabé en español
 
 
VICENTE DELGADO CARRETO
 
Poemas
 
Vicente Delgado Carreto

Vicente
Delgado Carreto

Oxaca de Juárez (México)

Sesenta y más

(Jotabem)


Pasaron sin darme cuenta
en mi vida los sesenta,

¿Debiera sentirme triste
por quE el blanco me reviste?
Gracias a Dios que no existe
en mi vida tal despiste.

Pues los sesenta me dieron
deleites que ya se fueron.

Tal vez llegue a los setenta,
no se rían que no es chiste
!Aunque tal vez ya lo hicieron!



El hacedor de versos


(Jotabé)


Que culpa tengo yo de haber nacido
un hacedor de versos, divertido

poeta del amor, ¡El más ferviente!
van mis letras al mundo decadente
e insensible, con la pasión ardiente.
Porque con el buen versar, ¡Nada siente!

Aunque mis versos nada cambiarán
pues al olvido siempre quedarán.

Más, el mundo vulgar y corrompido
a mí dulce versar, ¿Hará silente?
¡Nunca, nunca, a mi pluma callarán!



La ira


(Jotabé)


¿Por qué mi rostro luce tanto enfado
a punto de tener un altercado?

Presuroso me pierdo entre la gente
que mi paso lo ven... indiferente
Y tengo mala fama de valiente
por mi andar y mirada displicente.

Tal vez hicieron en mí, algún conjuro
pues no sé que me pasa, ¡Se los juro!

¿Por qué todo me causa desagrado
y mi cuerpo lo siento muy caliente
será que estoy viviendo algún apuro?


¿Acaso soy un cambio del planeta
por eso tengo, un rictus en la jeta?

¿Qué vuelve mi carácter agresivo?
¿Por qué soy de la rabia vil cautivo?
Quiero tener un vuelco regresivo
para vivir, ¡Sereno y positivo!

Que se alejen de mí, todas las rabias
y me lleguen las actitudes sabias.

Quiero escribir mis versos de poeta,
agradeciendo a Dios porque estoy vivo
y ya no ser... ¡demonio cascarrabias!



El crudo otoño


(Jotabem Kigo)


Sol que al viento difamas
¿Por qué reclamas?

Él escucha tu queja
si tus nubes aleja,
la historia así lo deja
¿Al mal semeja?

¡Qué triste está el Otoño!
Su negro moño,

habita entre las ramas
y sus sombras refleja...
¡Su ayer bisoño!



Tu forma de amar


(Jotabé)


A tu forma de amar no me acomodo
pues eres como el hielo y yo soy diodo.

En esas condiciones no resulta
que hagamos el amor. !Se dificulta!
Pues la frialdad del hielo lo sepulta,
tu manera de amar a mi me insulta,

pues me gusta abrazar, también besar,
y sin eso el amor, ¡Puede faltar!

Y tal vez necesito un electrodo
o pedir al doctor una consulta
¡Y así, poder amarte sin fallar!



Besos

(Jotabé)

Basado en el poema «Besos» de Gabriela Mistral.


¿Qué no ves que en tus labios y los míos
habitan vida mía, desvaríos?

Tus labios sin sabor de dura roca
he tenido que abrir con una broca,
y vibran de pasión, !Con ansia loca
con besos que inventé, para tu boca!

Yo te enseñé a besar, con gran esfuerzo
y en sed inagotable me contuerzo.

Vestí de bochorno tus labios fríos
y el néctar de sus besos me trastoca,
sin apartarnos !Aunque sople el Cierzo!



Mi bella Luna


(Jotabé)


A la luna adular me gusta tanto,
le escribo versos, le declamo y canto.

Mirando su carita siento el goce,
y sonríe, ¿Será qué me conoce?
Pues cuando por la noche dan las doce
la admiro a plenitud, y mi retoce,

es un suave sonar de cascabeles,
¡Estoy de fiesta, pongo los manteles!

Pues la quiero mucho, ¡No sabe cuánto!
A veces se esconde, me desconoce,
!Cansada de mirarse en mis carteles!



Salí de caza


(Jotabé acróstico Sérmico)


Quise una mañana salir de caza,
destrozar de su pecho la coraza,

su interior vaciarlo por contener,
corazón de roca en esa mujer
de forma dura, pues debe tener
piedra tal vez, al no saber querer.

Pero al ver con horror el agujero,
no quise continuar el daño artero.

Lo miré, ya cumplida mi amenaza,
pude al momento el daño deshacer
!Lograr salvarlo, porque así lo quiero!


Acróstico: Quise destrozar su corazón de piedra pero no lo pude lograr.



Harta mi corazón

(Jotabé)


Harta mi corazón antes que parta,
ensarta tu aguijón, que me comparta,

sabores de sus mieles, ¡Las mejores!
mayores son amor, mis estertores,
dolores con espasmos, ¡Los peores!
Sopores de muerte sin mis candores.

!Agita mi interior, mi muerte evita!
quita la señal, donde el mal habita.

Aparta de mí los males, mi carta,
sensores de salud son tus amores,
¡Finiquita la muerte y su visita!



De esbelto talle

(Jotabé Birrima)


Dama de esbelto talle, ¿Qué reclama?
¿Ama usted, de la nada hacer un drama?

Señora, ¿por qué daña a quien la adora?
Perfora mi interior y sin demora
deplora mi razón y el llanto aflora,
hora tras hora, ¡El corazón le llora!

Fracaso por su amor, ¡Qué triste caso!
¿Acaso morirá, como el ocaso?

Derrama tu pasión cuál fiera en brama
devora mi cuerpo, sé seductora
paso a paso, a mi piel darás repaso.


(Jotabé ganador del Decimoprimer Accésit del XII Certamen Poético Internacional Rima Jotabé)



Mi piel de pesadumbre


(Jotabé)


Sé que a veces descuido mis deberes,
¿Será que los forzados menesteres,

erosionan mi piel por la costumbre?
¿Era acaso temor, o incertidumbre
era tal vez calor como la lumbre?
Erguido soporté su podredumbre.

Al fin pude mirar mi piel canela
altiva, libre ya sin la tutela

servil, del mal sabor y los placeres,
erizada, quedó la pesadumbre,
lastimada perdió su manivela.



¿Por qué la vida…?


(Jotabé Misrrimo)


Los recuerdos me llenan de abundancia,
al sentir que se agota mi jactancia.

El reloj indicando que oscurece,
despide al Sol y entonces aparece
la Luna, cuando nota que fallece
el día, su belleza nos ofrece.

Añorando mis glorias de doncel,
me llegan los recuerdos en tropel.

Se va la vida y deja la constancia,
que todo lo que existe se envejece,
cumpliendo su papel se torna cruel.


Sabiendo que es la vida tan infame,
la gozamos sin ver que su derrame,

agota nuestras fuerzas, ya no crece
su caudal, su corriente se adormece,
abraza nuestro aliento que adolece
decumbente, la muerte se estremece

de alegría, cobrando su tributo,
sabiendo que triunfó su plan astuto.

Muerte y vida celebran su destrame,
y con pesar la noche se entristece,
mirando que solloza un rostro enjuto.



Dedicado a Amelia Blanchard


(2 Jotabé Vereal)


Los poetas viven aunque estén ya muertos,
pues fueron expertos, pues fueron expertos.

Bardos, eruditos que la historia afama,
pues con su legado creció la derrama,
del cálido verso cuál ardiente llama,
del amor sin drama, del amor sin drama.

Pido que los muertos descansen en paz,
pues seré veraz, pues seré veraz.

Las letras de Amelia son bellos conciertos,
sus letras perfectas se envuelven de gama,
sin tono fugaz, sin tono fugaz.


Su mágica pluma garbosa revuela,
la gran Venezuela, la gran Venezuela.

Las aves canoras cantando en la rama,
recitan los versos que escribe la dama,
sus tonos grandiosos serán mi proclama,
de regio programa, de regio programa.

Sus rimas hermosas glosando al amor,
diré con valor, diré con valor.

Iré por el mundo siguiendo la escuela,
de bella poeta creciendo su fama,
con gran resplandor, con gran resplandor.



Recuerdos de «mi gigante»


(Jotabé Misrrimo)


Tu recuerdo me llega muy constante,
tu valor, tu gruñido amenazante.

Recuerdo tu dolor y las heridas,
que por vagar tuviste merecidas,
tus ladridos, tus brincos y lamidas,
y las tardes de siesta compartidas.

Por tu valor y arrojo temerario,
fuiste cliente selecto al dispensario.

Dañaban a tu cuerpo rozagante,
arañazos y múltiples mordidas,
superando tus fuerzas tu adversario.


¿Por qué diste a tus pasos la vagancia,
porqué razón actuaste con jactancia?

¿Te faltaron acaso en las comidas,
tus huesos, las costillas bien hervidas?
¿Tus mañanas no fueron divertidas,
te cansó la rutina en nuestras vidas?

Extraño «mi gigante» tu ladrido,
tu pavor escuchando un estallido.

Tu bravura, tu pelo en abundancia,
en el charco tus lindas zambullidas,
tu mechón, en el viento suspendido.



Cada noche


(Jotabé)


En el azul, su brillo resplandece,
con luceros la noche se embellece.

Tic, Tac, mi corazón late con prisa,
adoro su latir porque me avisa,
que a lejana nación iré sin visa,
en busca de mi excelsa poetisa.

Cada noche me envuelve un dulce sueño,
mis versos la seducen soy su dueño.

Me cobijan sus letras, mi ansia crece,
pensando en su mirar y su sonrisa,
las distancias acorto con mi empeño.



En el inmenso azul


(Jotabé tridecasílabo)


El azúl descubre su mágico arrebol,
al ver que la tarde declina con el sol.

La Luna coqueta nos muestra su elegancia,
luce su belleza, sin demostrar jactancia,
los brillos del cielo, presentan abundancia,
y con sus destellos gozamos a distancia.

La noche presume sus íntegros reflejos,
sabe que sus fuegos deslumbran como espejos.

En el cosmos tienen los astros el control,
recrean la noche sin tener discrepancia,
al sombrío cielo le obsequian sus cortejos.



Sin amores


(Jotabé)


Los duelos abrazaron mis otoños
y el amor fue muriendo sin retoños.

Atraído quedé por tiernas flores,
compartiendo conmigo sus olores,
apagaron mi frío sus calores;
y el vacío colmaron sus amores.

Y felices pasaron mis estíos,
con aquellos amores sin ser míos.

El luto regresó sus negros moños,
y solo me quedé con mis albores,
sin flores adornando mis baldíos.



En la mar será mi adiós

(Jotabé)


Será en la mar mi adiós con sol huraño,
mirando el cielo azul de un mundo extraño.

Una barca con remos cual patojos,
llevará casualmente mis despojos,
sin velas, sin las flores en manojos,
al cielo mirarán mis muertos ojos.

Pues con la mar iré, partiré lejos,
roído por gusanos y cangrejos.

Sin sentir en el cuerpo ningún daño,
cumpliré de las olas sus antojos,
inerte ya mi cuerpo, sin reflejos.



El crudo Otoño


(Jotabem)


Al llegar el crudo otoño,
mueren flores con retoño.

Deshoja el viento la rama,
hojas que sirven de cama,
sintiendo quemar su llama,
el Sol sus nubes reclama.

¡Ay, la rama, Sol y flor,
ay, las hojas y el color!

¡Ay de mí, que al ser bisoño,
de amor vivo sin derrama
sin anhelos, sin calor!



Mi musa


(Jotabea)


Admiro de mi musa su fuerte resistencia,
haciendo que mis ojos adoren su presencia.

Notando que la casa reluce como espejo,
mi linda princesita provoca su reflejo
revisa mis andares al ver que me hago viejo,
¿será porqué mis pies no tienen buen manejo?

Poemas a mi musa compongo diariamente,
porque mis versos son, para ella solamente.

Mis quejas y lamentos escucha con paciencia,
sabiendo comprender me brinda su consejo
reinando en el hogar la dicha permanente.



El gordito caminero


(Jotabé hexadecasilabo)


Ya no quiero que me digan, el gordito caminero,
pues empiezo con mi dieta, mañanita Dios primero.

He pensado seriamente, ya dejar de ser tragón,
un día ni Dios lo quiera, por la citada razón;
por exceso de manteca, se detenga el corazón,
y que lloren por la ausencia, del gordito cachetón.

Adiós diré a los tamales, tan repletos de bacterias,
a la grasa y mil cochambres, circulando en mis arterias.

Que duro será quedarme, sin pasar al merendero
sin comer mi guajolota, con tortita y su jamón,
pero sano viviré, sin temor de las difterias.



Mi gato Claria


(Jotabem)


De lengua, me como un plato
o más bien, me como un gato,

un gato llamado Claria,
terrible como malaria,
sustenta la vida diaria
pues, hay, situación precaria.

Me gusta por ser grandote
además de estar gordote.

Cervecita con clamato,
tomaré con la Macaria
y del pez, un buen trozote.



Cuando a casa llegas


(Jotabé)


Mi terrible angelito, "mi chentón"
ilumina la casa retozón.

Ingeniero graduado en lo civil,
atractivo, gallardo, varonil;
demostrando su porte juvenil,
por los patios, parece proyectil.

Abrazando a su madre con cariño,
le prodiga sus besos, como niño.

Su presencia, nos llena de emoción,
comprobando que tiene buen perfil,
pues nunca, se le nota el desaliño.



Vivir enamorado


(Jotabé Birrima)


Enamorado estoy, sin un enfado
dotado de color apasionado.

Traje del buen amor mi vasallaje
encaje de emociones mi lenguaje,
ultraje no sufrió mi fiel ropaje
menaje principal de mi plumaje.

Canora fue mi fuente que enamora
receptora de amores en la aurora.

Agrado con las flores de mi prado
potaje con espléndido linaje
devora mi caudal y sin demora.


(Poesía ganadora de una Mención Especial del III Concurso Internacional de Poesía El mundo suena en Jotabé)



Para el amor ausente


(Jotabea)


Extraño tu mirada lo terso de tu frente,
que al no tenerte estoy, muriendo lentamente.

Estar de ti tan lejos me hace sentir congoja,
sin la sonrisa fresca que habita en boca roja
y el llanto que resbala, constante el rostro moja;
pues vivo sin vivir, en cruenta paradoja.

Contigo quiero estar calmar esta agonía
y darnos siempre paz colmados de alegría.

Quitarme para siempre tristeza decumbente,
que sea nuestro amor, historia que sonroja
y morir en tus brazos algún lejano día.



En tiempos de pandemia


(Jotabé)


En tiempos de pandemia, nada pasa,
si juicioso, reposas en tu casa.

En tiempos de pandemia, sin apuro,
vivirás en casita bien seguro,
los tiempos de pandemia, pegan duro
si ante el virus, te portas inmaduro.

A los males, tratemos con cautela,
evitando, que dejen su secuela.

El tiempo de pandemia, nos arrasa
sin que pueda salvarnos un conjuro
y triunfantes, seguir la francachela.



De mi vida diaria


(Jotabé octonario con versos franceses y rima doble)


Abrazado del bullicio, me concentro en mi trabajo
son los gajes de mi oficio las tareas a destajo.

Soy del gremio caminero y construyo carreteras,
con el alba y Dios primero, me levantan las carreras,
tengo siglo casi entero, pero piernas muy ligeras,
pues al jefe, mero, mero, no le agradan las flojeras.

Manejar me causa gusto y al volante me coloco,
a veces parece justo descansar los pies un poco.

Enemigo soy del vicio, no lo acepto ni en relajo,
pues se gasta buen dinero que vacía las carteras,
porque ya no soy venusto prefiero cuidarme un poco.



Para el amor ausente


(Jotabea)


Extraño tu mirada, lo terso de tu frente
que al no tenerte estoy, muriendo lentamente.

Estar de ti tan lejos me hace sentir congoja,
sin la sonrisa fresca, que habita en boca roja,
y el llanto que resbala, constante el rostro moja
pues vivo sin vivir, en cruenta paradoja.

Contigo quiero estar calmar esta agonía,
y darnos siempre paz colmados de alegría,

Quitarme para siempre tristeza decumbente,
que sea nuestro amor, historia que sonroja
y morir en tus brazos, algún lejano día.



De mi vida diaria


(Jotabé octonario con doble rima y versos franceses)


Abrazado del bullicio, me concentro en mi trabajo
son los gajes de mi oficio las tareas a destajo.

Soy del gremio caminero y construyo carreteras,
con el alba y Dios primero, me levantan las carreras,
tengo siglo casi entero pero piernas muy ligeras,
pues al jefe, mero, mero, no le agradan las flojeras.

Manejar me causa gusto y al volante me coloco,
a veces parece justo descansar los pies y el coco.

Enemigo soy del vicio, no lo acepto ni en relajo,
pues se gasta buen dinero que vacía las carteras,
porque ya no soy venusto prefiero cuidarme un poco.



Con mi té de manzanilla


(Jotabem Espejo Invertido)


Si tal vez comiera nuez,
me pondría deslumbrante
como el Sol, que diario brilla.

saludable como pez
muy cubierto de la tez.

En cuidarme soy constante,
sin fallar ningún instante
y sentirme refrescante.
Siempre pido a Dios mediante,

que le meta zancadilla
a terrible pesadilla.


Con limón y manzanilla,
todo irá de maravilla.

Jupa, jupa, muy campante
doy tres pasos adelante
pues sanito y rozagante,
al covid, le haré desplante.

Ja, ja, contaré hasta diez,
botellita de jerez...

Voy metiéndole canilla
y del mal saldré triunfante
esperando mi vejez.



Las flores del Cuéramo


(Jotabé)


Nacieron del cueramo bellas flores
encantando sus fúlgidos colores.

Expone a cielo abierto su tesoro
extasiando a mi vista del azoro,
el verde de sus hojas, como adoro
y a sus tallos, que visten con decoro.

Sus verdores denotan lozanía,
como el potente sol de mediodía.

Transcurren de sus años los mejores,
sin que sufran sus ramas deterioro,
pues la fuerza le crece cada día.



Razones tendrá la muerte


(Jotabé)


Con tesón me persigue a mí, la muerte,
creyendo que por ello tengo suerte.

Sabiéndome bizarro y bien formado
quiere pasar los días a mi lado
que de su amor me sienta afortunado
que de ella viva siempre enamorado.

Esquivándola vivo cruel tormento,
pues me causa terrible detrimento.

Quiero seguir mi vida, siendo fuerte
sin tener mi camino terminado
y sin ser de la muerte lucimiento.



Beber sin demora


(Jotabem con estrambote)


El que beba sin demora,
no verá, brillar la aurora,

Pues la salud perjudica,
en mí, beber, ya no aplica,
aunque sirvan en barrica
o botella con canica.

Bebiendo mejor café
ya mi rima terminé.

Y que venga la señora
que en rimar no se complica,
al siguiente Jotabé.

Y se fue,
con Norma, mi pie forzado,
Como pollo desplumado.



Quiero ser


(Jotabé)


Quiero ser, tu desvelo en madrugadas
y arrebol, de tus tardes relajadas.

Ser el sol, que goloso te caliente,
recuerdo de tu sueño más candente,
a tus fobias, ponerle repelente;
el dueño de tus besos solamente.

Prendedor de tu pelo ensortijado
y en tus ojos, el guiño enamorado.

Furtivo robador de tus miradas
morador, exclusivo de tu mente,
lo mejor, del presente y tu pasado.



Tus pasos seguiré


(Jotabé)


Contigo partiré, como la tarde,
cual despojo, sin fuerza y sin alarde.

Como rayo de sol, que languidece,
seré flor, que en otoño, palidece;
un sonido que el viento desvanece,
un rufián, que en las sombras se guarece.

Tus pasos seguiré sin la demora
siguiendo tu valor de gran señora.

Pues al irte de mí, me hará cobarde,
sintiendo que mi fuerza desfallece,
al quedar, sin su fuente productora.



Amor de caminero

(Jotabea)


Mi ser aventurero te causa desazón
pues veo tus mejillas que lucen hinchazón.

Me llena de tristeza tus ojos contemplar,
con gotas de rocío cayendo sin parar,
tus lágrimas amargas, que me hacen suspirar,
por ser un caminero luchando sin parar.

Visita familiar anhelo Dios primero,
pues tengo en este mundo cariño verdadero.

Hoja que el viento arrastra cual débil ramazón,
me voy por los caminos, ansiando tu mirar
pues tengo los modelos de apuesto caminero.



El día y la noche


(Jotabe)


El oscuro color, dejó su adiós,
mirando que el albor lo manda Dios.

Es la noche cobijo muy seguro,
más el día, se vive con apuro,
ya se fue con la noche el cielo oscuro,
y llegó con el alba, el cielo puro.

Opuestos son los dos por existencia,
sin que nunca, compartan su presencia.

El uno con el otro van en pos,
como fruto de verde a lo maduro
sin que pongan, por ello resistencia.

 
     
   
     
 
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