Vergel florecido

(2 Jotabeas)


El poema que verso, dolorido, lloroso,
es del siglo pasado de un amor primoroso.

Que dulzura de labios, su besar fascinaba,
encendía sentidos la locura causaba.
Su campiña de rosas con ternura vibraba
acunando sus flores a la vez que clamaba.

Nos bebimos el néctar del amor traslucido,
nos quemamos la boca con besar encendido,

Compartiendo susurros de querer amoroso.
a la vez con delirio, me decía, juraba.
Sois un ángel del cielo. ¡Yo! Vergel florecido.


Es la vida cambiante, de maneras dispares,
descubrieron amores, nos cortaron besares.

La nostalgia me vence, me columpia, derriba,
y navego perdido, de besarnos nos priva.
Caminando y muriendo mi penar reaviva
al saber la llevaron al convento cautiva.

Recordando ternuras, recorriendo caminos,
en mi mente perduran sus besares tan finos.

Nos cortaron los besos y también los amares,
en convento penando, vive muerta. ¡No viva!
¡Yo!, llorando recuerdo sus amores divinos.



Arrullarse en sus flores

(Jotabea)


Es un cielo divino que luceros destella,
Es un sol encendido que fulgura con ella.

Qué belleza la suya, tiene encanto de diosa,
es locura de ensueños, es mujer majestuosa.
Es embrujo glorioso, del jardín es la rosa
Es un ángel del cielo que en la tierra se posa.

¡Oh!, beber de la fuente de tan ricos sabores,
recorrer sus jardines, arrullarse en sus flores.

Es perder los sentidos al mirarla tan bella.
Es morir con los besos de su boca preciosa,
Es volar a los cielos al tener sus amores.



Dialogo de amantes

(2 Jotabés)


El

Al soñar tu beldad de amor sagrado,
me enloquecen tus frutos del pecado.

Tus vaivenes que sueño flor querida,
ya me llevan a amaros sin medida.
Sois la flor primorosa desprendida.
Lindo sol que adorarte me convida.

Tus andares me causan embelesos.
Tu mecer amoríos inconfesos.

El amor es misterio bien guardado.
Es la luz que ilumina dando vida,
obteniendo en lugar de guerras… Besos.


Ella

Tus palabras rebosan hermosura,
elegancia, donaire y gran ternura.

Al oír tus palabras tan hermosas,
delicadas, divinas y mimosas.
a mi cuerpo lo baten mariposas
al pensar tus caricias primorosas.

Me seduces, absorbes mis sentidos.
¡Raudo, ven! ¡Desabrocha mis vestidos!

Bambolea mi barca con dulzura.
y tendrás del jardín todas las rosas,
y cariños que brotan encendidos.



Versos con rima Jotabé

(Jotabea)


Adora el verso tuyo, que es flor del alhelí,
y guarda los recuerdos de besos que te di.

Versemos los poemas, con Rima Jotabé
que todo lo hermosea, florea y se le ve.
Su rima goza encanto, sapiencia y mucha fe,
versemos pues con ella, tomando un buen café.

Usemos esta rima que todo lo embellece,
¡Con besos o sin besos, el verso se enaltece!

Escribes tus poemas con dulce frenesí,
y vuestras lindas odas con mimo leeré,
loando la belleza del verso que florece.


(Poema Finalista del X Certamen Poético Internacional Rima Jotabé)



Qué decir

(Jotabé)


Qué decir de la niña primorosa,
que es gardenia, jazmín, clavel y rosa.

Su divino versar causa clamor ,
es un sol, celestial, deslumbrador.
En sus letras renace nueva flor
y rimar Jotabé con todo amor.

Su versar debilita la tristeza,
encendiendo fogatas de belleza.

Esta niña versando es primorosa,
un encanto mostrando con primor
que su cante es del cielo la lindeza.



Lágrimas, por riqueza

(Jotabé)


Hoy describo con versos la promesa.
Es falacia tu boca cuando besa.

Conociendo el porqué de tu postura,
solo sé la tristeza en mi perdura,
al soñar con tus mimos, y dulzura,
sin gozar tu jardín de la hermosura.

Tus acciones percibo con dolor
te perdió la ambición muchacha en flor.

Hoy recorres palacios cual princesa,
recordando el besar que en ti perdura,
al cambiar por riquezas el amor.



Tus encantos

(Jotabé)


El encanto sensual de sus andares,
enaltece sus formas peculiares.

Histerismo producen sus maneras,
al mecer con embrujo sus caderas,
y mostrar a los ojos primaveras,
produciendo pasiones y quimeras.

Su cariño de ensueño desmedido.
Es hechizo al quitarse su vestido.

¡Oh, mujer!, me fascinan tus mirares,
si tus besos por suerte me los dieras
vibraría tu cuerpo florecido.



Flor de mis ensueños

(Jotabea)


No sientes muchachita que al mirarte suspiro.
y cuando no te veo tristemente deliro.

Es tanta la dulzura de tu tierno mirar
que llevas a mi mente con tu imagen soñar,
y verte flor del mundo con rubores besar,
oyendo de tu boca, no me dejes de amar.

Locura vivo niña, verseando el sentir.
¡Oh, sueños, fantasías!, despertar es sufrir.

Preciosa muñequilla, no bebí tu respiro,
ni tuve a quien adoro, ni gocé tu besar.
ni tuve tus encantos, ni escuché tu gemir.


(Poema ganador del Décimo Accésit del IX Certamen Poético Internacional Rima Jotabé)



Nostalgia de amores

(Jotabea)


Jotabea sublima con su linda estructura
y subyuga al poeta con su rima y dulzura.

Con su encanto rasgueo mi querer escondido,
al que escribo poemas con cariños que anido,
recordando caricias de jardín florecido,
que vibrando pasiones suspiraba encendido.

Caprichosa su boca, su besar primoroso,
su campiña de rosas, su querer delicioso.

En mis noches la sueño con amor de locura,
recordando que tuve su querer desmedido,
su suspiro de anhelos, su gemir amoroso.



Milagros del amor

(Jotabea acentuación melódica)


La adoraba de forma celestial, silenciosa,
se mostraba doliente, me miraba mimosa,

su hermosura divina desvarío causaba,
con airosos andares sus caderas cimbraba,
pesadumbre, tristeza, desazón me causaba,
al mirar que en silencio suspiraba y lloraba.

Al mirarla tan triste le pregunto la causa,
en silencio me mira. ¡Su mirar me traspasa!

Con sonrisa de cielo me contesta llorosa,
no notabas al verme que en silencio te amaba.
¡Toma!, bebe las mieles de este amor que me abrasa.



Sibilino amor

(Jotabea)


Al mirar sus encantos y su cara de diosa
la adoraba de forma celestial, silenciosa.

Su hermosura divina desvarío causaba,
con airosos andares sus caderas cimbraba,
a la vez con embrujo su mirada me daba,
produciéndome ensueños, al mirar me miraba,

a la vez percibía su sonrisa doliente,
le pregunto las causas, y contesta valiente

con sonrisa de lunas, a la vez que llorosa,
con amor me decía; ¡No notabas te amaba!,
y, por ello te ofrezco, mi querer vehemente.



Me seduce tu belleza

(Jotabé)


Me seduce tus formas de princesa.
Me enloquece tu boca si me besa.

¡Oh lucero de cielo iluminado!
Alucino en tu cuerpo inmaculado.
¡Oh dulzura de río desbordado!
Desvarío en tu cuerpo encarcelado.

¡Oh mujer! Arcoíris de colores,
no sonrojos, vergüenzas, ni rubores.

Degustemos el beso que embelesa,
y gocemos querer tan incendiado,
zozobrando en la barca los amores.



El vaivén de la brisa

(Jotabea)


Me produjo sorpresa, tan preciosa doncella,
de atracción tan sublime, me asombró por tan bella.

Elegante, fastuosa, caminaba de prisa,
y en su boca de rosas, percibí su sonrisa.
Agitaba caderas al vaivén de la brisa,
y sus pechos marcaba, con ceñida camisa.

Sus encantos, sus dones, y su boca mimosa,
es embrujo divino, tiene hechizo de diosa.

Se detienen los soles, al mirar que destella,
y los vientos se paran, a besar su sonrisa,
floreciente que emerge, de sus labios de rosa.



Noches de ensueños

(Jotabé)


En noches celestiales agitadas,
de amor y seducciones perfumadas,

vivimos con embrujo y fantasía,
delirios amorosos ¡Que armonía!
Danzando al son de dulce sinfonía,
vibramos del amor que enloquecía.

Suspiros deleitosos que gozamos,
y en locos bamboleos naufragamos.

Con luz embelesada en las miradas,
cegados de deleites y alegría,
amores majestuosos alcanzamos.


Al ser embrujo el fruto degustado,
volvamos dulce cielo enamorado

Catando de la boca los sabores,
bebemos de las rosas los licores
volando a las alturas sin rubores,
llegamos a la luz de los amores.

El gozo se avivó, querer clamaba.
¡Amores para siempre reclamaba!

Grandioso fue el delirio disfrutado,
que invocan con locura sus candores.
perduren las ternezas que le daba.



Esclavo tuyo

(Jotabé)


¡Oh! Diosa antojadiza bien nacida,
me tienes prisionero ya por vida.

Esclavo que provoca tus fervores,
y calma tus pasiones y furores,
en noches sin recato ni rubores,
colmando tus caprichos con amores.

No sueltes ama mía mis cadenas,
que quiero así purgar las tristes penas,

llenando de placeres sin medida,
tu cuerpo pincelado de colores.
que llena de alegrías mis condenas



Para Marta María Requiro Dueñas

(Jotabé tetradecasílabo)


Con toda admiración, a la niña encantadora,
que cuando escribe deja, su encanto que enamora.

Espero que esta fiesta tenga lindo colofón,
que haya paz, amor, risa, y alegría a montón.
A la vez aprovecho. Digo de corazón,
lograr nunca esperaba tan linda distinción.

Gracias y fuerte abrazo. Viva la poesía,
y merecido aplauso, para… Marta María.

En tus escritos niña siempre el encanto aflora,
vas dejando la estela de luz y de ilusión,
al versar flor divina, con dulzura y armonía.



Dame tus amores

(Jotabé dodecasílabo)


Capullo de rosa de amor perfumada,
hechiza chiquilla tu linda mirada.

Muchacha divina, lucero del cielo,
me llenas de amores, me llenas de anhelo.
¡Oh, dulce muñeca!, me causas desvelo,
consiente mis besos. ¡Se tú mi consuelo!

No notas fenezco, por qué tan remisa,
acoge mis besos mi bella artemisa,

verás que tus flores suspiran amada.
Muñeca adorada, desviste tu velo,
y deja que beba tu dulce sonrisa.


(Poesía ganadora del Primer Premio del I Concurso Poético en Rima Jotabé Jotabeando USA)



Me fascina pintarte de colores

(Jotabé)


Me seducen tus magias, tus maneras,
el vaivén de tu cuerpo y tus caderas.

Me deleita mirar tus lindas flores.
Me fascina pintarte de colores.
Me alborota notar en ti rubores.
al mostrar tus encantos y candores.

Me cautiva el volar de mariposa.
Me embelesa mirarte tan preciosa.

Me enloquecen tus campos, tus praderas.
La pasión de tus besos, tus amores.
El delirio que muestras linda rosa.



Diosa del Olimpo

(Jotabéa)


Mi diosa del Olimpo, linda flor de colores,
beber en esa boca, me produce calores.

Tus labios son canela, tu besar cosa fina,
encienden los sentidos, degustarlos fascina.
Tu cuerpo primoroso, mi locura conmina,
llevándome hasta el cielo, tu querer que ilumina.

Zozobro en tus torrentes, enloquezco en tus mares.
¡Me pierdo en tus amores, de ternuras dispares!

Bebamos las esencias del jardín y sus flores,
colmando de dulzores nuestra fuente divina.
Llenándonos de gozos, matando los pesares.



Mujer primorosa

(Jotabea)


Apenada la miro, consternada, angustiosa.
Desolada ella vive, siendo flor tan hermosa.

Muñequilla de ensueño, quien produce suspiros
a tu boca de rosas, para tanto así heriros.
Arrincona amoríos que no van conveniros,
y encontrarás quereres, que de amor van vestiros.

El mirar de tus ojos origina consuelos,
encendiendo alegrías, apagando desvelos.

Adorable doncella, primavera preciosa,
fantasía de encantos, es consejo deciros,
que los dioses al veros, en ti… Miran los cielos.



Mujer divina

(Jotabéa)


Mujer de los ensueños y flores primorosas
en noches de delirios suspiro por tus rosas.

¿No sientes tú mi llanto, clamar tu nombre a gritos?
¿Ni sabes por vos tengo deseos infinitos?
¡Mi diosa de quereres, bailemos nuestros ritos,
dejemos nuestros cuerpos que maten apetitos!

Bebamos muñequita, bebámonos los besos
tejiendo con cariños collares de embelesos.

Mezámonos chiquilla de formas deleitosas,
gocemos los quereres ardientes y bonitos,
matando los caprichos, de amores inconfesos.



Muñequita preciosa

(Jotabéa)


Tu alegría se escinde, quién tu sonrisa apaga.
¿Quién de tanta tristeza tu corazón embriaga?

Encanto primoroso. ¿Por quién tantos suspiros?
¿Quién daño te produce? ¿Quién ambiciona heriros?
¡Oh!, todo lo daría por poder abatiros
los males que vos sufres, y poder ver reíros

Esplendente lucero de imagen luminosa,
reflejo de la noche, locura primorosa,

si contarte pudiera, loco amor que me embriaga,
y que llevo en secreto por temor a deciros,
que te adoro en silencio muñequita preciosa.


***

¡Que soy yo el nacimiento de todos tus dolores!
Que con delirio me amas, que lloras mis amores.

¡Oh niña deliciosa! ¡Caricia de los vientos!,
tus palabras me inhiben torturas y tormentos,
llenándome de vida, de amores y contentos,
al saber flor del mundo, que tengo tus alientos.

Mariposa de ensueños, mujer esplendorosa
el vaivén de tus olas es demencia gustosa.

Apaguemos con besos tan mustios sinsabores.
Acúnense los cuerpos de quereres hambrientos,
¡Yo!, bebiendo tus mieles. ¡Tú!, gimiendo amorosa.



Labios de miel

(Jotabéa)


Muñeca primorosa no sientas tu rubor
que bien tus ojos dicen que vives en amor.

Jazmín de abril soñado, mi luz de amanecer
perderme por tus campos, es como poseer
un cielo luminoso que nadie alcanza a ver.
¡Oh, flor de los encantos, me vas a enloquecer!

Que excéntrica apetencia, me invade la ilusión
pensando voy tenerte, bailando en el salón.

Locura de embelesos, muñeca, linda flor,
atémonos con besos y mimos del querer
cediendo a los amores momentos de pasión.



Sueño con tu belleza

(Jotabéa con estrambote)


Tu belleza la sueño, la imagino y la tengo,
en la imagen tan linda que en mi mente retengo.

En los días opacos, en las noches macabras.
En el beso ofrecido, que con mimo apalabras
En la estampa de amores, que en la mente me labras.
En el eco que trae, tan preciosas palabras.

En la brisa que pasa, que muy dúctil me roza.
En la flor de los campos, en tus besos de moza.

¡Oh! chiquita divina, con amor a ti vengo,
a pedirte mi diosa, que las puertas me abras
y me otorgue tu boca, la hermosura que goza.

El alma se remoza,
al tener de tus labios, esos besos de niña,
y gozar los candores, de tu hermosa campiña.



Suelta tus cadenas

(Jotabé con estrambote)


Angostos suspirares de ti vienen,
ni vientos, ni huracanes me detienen.

Aprisa parto a ver tus tristes penas,
soltando de inmediato las cadenas,
que prendes a tu mente y te condenas,
negando tu besar a yerbas buenas.

Veloz y raudo parto a tu morada,
buscando tu belleza enamorada.

Tendré las dulces mieles que retienen
guardadas, -cual tesoros- tus colmenas.
¡Dulzura de azucena perfumada!

¡Oh cielo! Flor amada,
en loco frenesí nos amaremos,
y un cielo delicioso alcanzaremos.



No llores por amores

(Jotabéa - Acento fonético en 2, 6, 9, 13)

(Para ELISA)


No llores niña hermosa, de forma lastimosa.
Ni penas, ni tristezas, ternura primorosa.

No gimas por amores, ni exhales más suspiros,
ni tengas más pesares, ni dejes más heriros,
con tóxicas promesas, que agiten tus respiros.
Tendrás donceles muchos, que amores van pediros.

Escinde la tristeza, regala tu sonrisa,
y deja flor del viento, que juegue con la brisa.

¡Oh luz de los embrujos! ¡Chiquilla deliciosa!
Olvida tanta angustia, ni en males vos sumiros.
¡Serás por siempre amada, mi tierna y dulce Elisa!



Espinas y rosas

(Jotabeím)


Jotabém: 1- La niñez

En la niñez eran juegos,
poco a poco fueron fuegos.

Según el tiempo pasaba,
claramente se notaba,
que la empatía aumentaba.
¡El rubor, nos acusaba!

Queriéndonos como niños,
brotaban roces armiños.

Eran lindos y tan ciegos,
que en los ojos se mostraba,
que emergían los cariños.



Jotabém: 2- Pubertad

Empezaba la ternura,
a mostrarnos la dulzura.

Su cuerpo jardín de flores,
era un mar lleno de amores,
mostrando con sus rubores,
doncellez en sus candores.

Placideces prodigadas,
por almas embelesadas.

Que de forma tierna y pura,
pincelaban con colores,
las caricias incendiadas.



Jotabém: 3- Sollozos.

Entre suspiros y besos,
quedamos atados presos.

De turbación y alegría,
lágrimas ella vertía,
al sentir que cada día,
de deleite enloquecía.

Cual el albor de la aurora,
relucía encantadora.

Era fuente de embelesos,
ola de la mar bravía,
ambrosía embriagadora.



Jotabém: 4 - Su beldad

Tanta querencia sin par,
nos hace de amor vibrar.

Era el alba mañanera,
amapola, enredadera,
la voz más dulce que oyera,
suplicar que la meciera.

Tenía magia, terneza,
finura, delicadeza.

Era flor del azahar,
campiña de primavera.
¡La reina de la belleza!



Jotabém: 5- Mar y cielo.

Cual una estrella brillante,
de luz llena al caminante.

Era mujer luminosa,
esplendente, majestuosa.
Tierna, dulce, muy mimosa.
¡Era un capullo de rosa!

Sus embrujos y maneras,
eran ensueños, quimeras.

Aguamiel para el amante,
con su forma esplendorosa,
de su ritmo de caderas.



Jotabém: 6- Sorprendidos

La tristeza y nuestra gloria,
sigue atada en la memoria.

Nuestro querer descubierto,
nos produce desconcierto.
Con el corazón abierto,
somos sombra en el desierto.

La represión nos trastoca,
solivianta, nos provoca.

Floreando nueva historia,
nos veremos a cubierto.
¡La exaltación nos aloca!



Jotabém: 7- Desvaríos.

Envueltos en seducciones
se acrecientan emociones.

La pasión que se trasluce,
amarnos más nos induce,
y el delirio nos produce,
ver un cielo que reluce.

Un ángel vino volando,
y se quedó contemplando,

tan puras exaltaciones,
y por ello a Dios aduce.
No pecan… Se están amando.



Jotabém: 8- Nuevo correctivo.

De los hechizos y goces,
vamos a males atroces.

Entre tristezas, lamentos,
nos azotan malos vientos,
al llegar abatimientos.
¡Angustias, nuevos tormentos!

Consiguieron separarnos,
¿Hasta cuándo sin besarnos?

Penalidades feroces,
rosarios de sufrimientos,
pasamos al no mirarnos.



Jotabém: 9 - Murmullos.

De manera permanente,
cuchicheaba la gente.

Amar, fue su gran pecado,
su padrastro acaudalado,
el noviazgo ha castigado.
¡Quiere mozo adinerado!

Me consume no mirarla,
y no poder venerarla.

Peregrino penitente,
sigo de ella cautivado.
¡Todo diera por besarla!



Jotabém: 10 - Su voz escucho.

¡Aun te adoro, ven aprisa,
al convento la Clarisa!

La mayoría alcanzada,
al fin seré liberada.
Nadie impedir podrá nada.
Te espera ansiosa… tu amada.

Vuelo colmado de anhelo
¡Ay! si tuviera su cielo.

Oraríamos en misa,
a la Madre Inmaculada,
por cubrirnos con su velo.



Jotabém: 11- El encuentro

Nos miramos, abrazamos,
sonreímos y lloramos.

Surge el beso primoroso,
tierno, apacible, mimoso,
soberbio, bello, amoroso.
¡Alucinante precioso!

Los poros de nuestra piel,
eran colmena de miel.

Con las penas acabamos,
todo fue maravilloso,
con nuestro amar puro y fiel.



Es embrujo divino

(Jotabéa)


Que lindeza de niña, cuanto encanto, que bella,
con vestidos de galas, es un sol que destella.

Que lindeza la suya, tiene encanto de diosa,
es locura de ensueños, es doncella fastuosa.
Es embrujo divino, con su imagen preciosa.
Es, un ángel del cielo, que en la tierra se posa.

Es mujer del hechizo, su mirada fascina,
es la flor que enloquece, con su forma divina.

Su sonrisa en los labios, es fulgor de una estrella.
Es un fuego sagrado, que quereres rebosa.
¡Una musa en la tierra, que al poeta ilumina!



Al vaivén de la brisa

(Jotabéa)


Me produjo sorpresa, tan preciosa doncella,
de atracción tan sublime, me asombró por tan bella.

Elegante, fastuosa, caminaba de prisa,
y en su boca de rosas, percibí su sonrisa.
Agitaba caderas al vaivén de la brisa,
y sus pechos marcaba, con ceñida camisa.

Sus encantos, sus dones, y su boca mimosa,
es embrujo divino, tiene hechizo de diosa.

Se detienen los soles, al mirar que destella,
y los vientos se paran, a besar su sonrisa,
floreciente que emerge, de sus labios de rosa.



Dame el roce de tus labios

(Jotabéa)


De tus labios anhelo las mieles que rezumas,
a la vez con tu boca los besos me consumas.

Beberé las esencias del néctar encendido,
sentirá las caricias tu cuerpo florecido,
agitándose loco, cual mar embravecido.
¡Gozarás lindo cielo, del beso desmedido!

Te daré linda diosa cariños deliciosos,
rebosados de amor y mimos primorosos.

Procurando ternuras, haciendo buenas sumas,
nos daremos el beso más tierno concebido.
¡Con la barca bogando seremos muy dichosos!



Que belleza la suya

(Jotabéa)


Que belleza la suya, tiene encanto de diosa,
es un ángel del cielo, del jardín es la rosa.

Caminando de prisa se nos muestra tan bella,
¡Preciosura del cielo, se parece una estrella!
Oscilante lucero, tu mirada destella.
¡Esplendente doncella, tu beldad deja huella!

Caminante de ensueños, paseante de amores,
abanicas los tiempos al soñar tus candores.

¡Oh mujer del embrujo, sois imagen preciosa!
Jardinera de hechizos, tanto amor me atropella,
y frenético espero… De tu hoguera calores.



Noche de ensueños

(Jotabé)


En noches celestiales agitadas
de amor y seducciones perfumadas,

vivimos con embrujo y fantasía,
delirios amorosos ¡Que armonía!
danzando la más dulce sinfonía,
al compás del amor que enloquecía.

Suspiros deleitosos que gozamos
y en locos bamboleos naufragamos

con luz embelesada en las miradas,
cargados de deleites y alegría,
amores majestuosos alcanzamos.


Al ser embrujo el fruto degustado,
volvemos a la miel. ¡Rico bocado!

Catando de la boca los sabores,
bebemos de las rosas los licores
volando a las alturas sin rubores,
cegados por la luz de los amores.

El gozo se avivó. ¡Loca clamaba!
que amores para siempre reclamaba.

Al ser tanto el delirio disfrutado,
invocan con locura sus candores.
No paren las ternezas que le daba.



Me seduce tu aroma

(Jotabéa)


Me seduce tu aroma, tu fragancia y tus flores.
Me apasiona y me incendia contemplar tus candores.

Tu belleza chiquilla me fascina y provoca
¡No permitas mi rosa, que tu amor sea roca!
Con tu llama encendida se desboca mi boca,
al sentir que me besas de manera tan loca.

Muñequilla de ensueños, hermosura aromada,
azucena del cielo, linda flor adorada.

Me arrebatan tus besos, me enloquecen de amores,
al sentir vida mía que el amor se desboca,
y nos lleva a los cielos de manera alocada.



Triste llanto

(Jotabé)


Penoso y triste llanto muestras niña,
no angustia, deja amor te bese y ciña.

Aprisa parto a ver tus tristes penas,
y darte dulce amor, caricias plenas,
soltando púas llevas cuál cadenas.
¡Oh dulce flor! De fuego y luz me llenas.

Veloz y raudo parto, tomo vuelo.
buscando ver tus ojos, lindo cielo.

¿Tendré tu boca ardiente dulce niña?
Amemos dulce amor a manos llenas.
¡Volemos linda diosa o muero en celo!



Pensando en ti

(Jotabéa)


En la tarde callada miraré tu retorno.
en la imagen tan linda que ilumina mi entorno.

Te veré con las olas que amorosas te mecen
En los ríos y lagos, en mareas que crecen.
En las playas de fuego con arenas que escuecen,
al pensar en tus besos que de amor me enloquecen.

En el campo radiante que nos muestra sus flores.
En la brisa que trae tus suspiros de amores.

En los soles y estrellas al mirar su contorno,
y observar tus encantos que la noche esclarecen,
y amorosa me ofreces tu querer y candores.



Diosa antojadiza

(Jotabé con estrambote)


¡Oh, Diosa antojadiza, de alma loca!,
tu anhelo de quereres me provoca.

Esclavo soy que calma tus ardores,
y colma de placeres tus furores.
matando tus caprichos con amores,
en noches sin recato ni pudores.

Rehén que rocía tus jazmines,
y llena de placeres tus confines.

El ave que encarámela tu boca,
y cubre de caricias a tus flores,
trotando tu campiña, tus jardines.

¡Resuenen los clarines!
No sueltes mis cadenas ama mía.
Matar quiero contigo mi agonía.



Bien sé los motivos

(Jotabéa con estrambote)


Mi niña primorosa, majestad de las flores,
por joyas remplazaste nuestros locos amores.

Ayer tan complaciente tu candor me entregabas.
¡Adónde van los besos encendidos que dabas!
Recuerdo tus cariños, lo mimosa que estabas.
y llena de placeres el delirio alcanzabas.

Conozco los motivos, trastocaste caminos,
te ciegan los palacios, sus tapices tan finos.

Tu estrella no reluce, se opacaron colores,
ni tienes los cariños que conmigo gozabas.
¡Hoy! Lágrimas afloran de tus ojos divinos.

Cambiaste los destinos,
de adornos te engalanas, mas, caminas muy triste
soñando las caricias que conmigo tuviste.

(Poema ganador del Tercer Accésit del,
VI Certamen Poético Internacional, Rima Jotabé)



Es embrujo divino

(Jotabéa)


Que lindeza de niña, cuanto encanto, que bella,
con vestidos de galas, es un sol que destella.

Que lindeza la suya, tiene encanto de diosa,
es locura de ensueños, es doncella fastuosa.
Es embrujo divino, con su imagen preciosa.
Es, un ángel del cielo, que en la tierra se posa.

Es mujer del hechizo, su mirada fascina,
es la flor que enloquece, con su forma divina.

Su sonrisa en los labios, es fulgor de una estrella.
Es un fuego sagrado, que quereres rebosa.
¡Una musa en la tierra, que al poeta ilumina!

(Poema ganador del Segundo Accésit del,
IV Certamen Poético, Rima Jotabé)



Mírarla tan mimosa

(Jotabé con estrambote.)



El ala vagabunda de la brisa,
me trae sus suspiros, su sonrisa.

La sueño tan mimosa tan lozana,
que miro la beldad que de ella emana,
haciendo al despertar cada mañana,
pedir, me de la miel de su fontana.

¡Oh Dios! Gustosa y tierna ella me ofrece,
su cuerpo primoroso que enloquece.

Se quita ropa, tules y camisa.
Tenerla así, tan linda y tan cercana,
el fuego se estimula, se enardece.

Con furia el amor crece.
Gozando con locura entre las flores,
pensábamos morir los dos de amores.

(Poema ganador del Tercer Premio del,
III Certamen Poético, Rima Jotabé)



Qué dulzura

(Jotabé)


Mujer, vivo en temor, en la locura,
no tengo de tu boca la ternura.

Por qué tanto rechazo al beso mío,
que es lluvia, mar, amor y fuerte río,
que busca dar calor para tu frío,
y hacer goces de ardiente escalofrío

viviendo tus jardines y tus flores,
el máximo placer de los amores.

Tener tu linda boca qué dulzura,
sería de tus rosas el rocío,
sembrando de deleite tus candores.