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Directorio de poetas que escriben en Rima Jotabé



Rima Jotabé



Directorio de poetas que escriben en Rima Jotabé en lenguas diferentes al Español

Directorio de Poetas que escriben en rima Jotabé en español
 
 
HARISBEL LORENNYS BOTTARO BOTTARO
 
Poemas
 
Harisbel Bottaro

Harisbel Lorennys
Bottaro Bottaro

Venezuela

Las letras de mi alma

(Jotabé Corona eneasílabo)

En memoria de mi amiga Byrian Miranda


Jotabé Madre

Sepultaron la primavera.
Reposa el invierno en mi vera.

En mi alma rota y dolorida,
llueve hasta el fondo de la herida.
Mi frágil corazón no olvida,
la mustia hora de su partida.

Pupila inundada en lamento
en sombrío pesar resiento.

Y un «¡Te quiero!», ella me dijera.
Fue ese su último adiós en vida.
Un inefable sentimiento.


Jotabé Hijo 1

Sepultaron la primavera.
¡Si resucitarle pudiera!

Un triste clamor subió al cielo,
llantos por el profundo duelo.
Dolor y funesto desvelo,
pesadumbres y desconsuelo.

Su grácil obra interrumpida
anunciaban su despedida.

¡Oh mi Dios! ¡Qué un mal sueño fuera!
Imploré con ávido anhelo
en mi alma rota y dolorida.


Jotabé Hijo 2

En mi alma rota y dolorida
va mi tristeza desmedida.

Bruma que en lágrimas se vierte,
que me desgaja y me convierte
en un tétrico verso inerte
desde su despiadada muerte.

«¡No ha muerto!» «¡No! ¡Es un vil invento!»
desean todos de momento.

Sí, es cierto: muerte incomprendida…
Nostalgia, rabia, latir fuerte,
pupila inundada en lamento.


Jotabé Hijo 3

Pupila inundada en lamento,
mustio y prolongado tormento.

Lucubra en sombras la razón,
desgarra y crea confusión.
Gélida agonía y aflicción,
amarga y trunca sensación.

Temprana muerte traicionera
y alados sueños en quimera.

Honda charca en el pavimento,
y un desconsolado aluvión.
Reposa el invierno en mi vera.


Jotabé Hijo 4

Reposa el invierno en mi vera
evocando amor que nos diera.

¡Tantas historias conversamos!
¡Grandes locuras deliramos!
Lágrimas y risas soñamos…,
Con el alma, nos abrazamos.

Sentí en mis venas su caída,
en una batalla perdida.

Lid que confrontó cual guerrera
y aunque en su lucha acompañamos,
llueve hasta el fondo de la herida.


Jotabé Hijo 5

Llueve hasta el fondo de la herida.
Intenso golpe el de su ida.

Su esencia ha quedado plasmada
en letras de su alma inspirada;
su voz dulce ha sido apagada
y el brillo alegre en su mirada.

De remembranza y sentimiento
mi mente navega en recuento.

Tarde de mayo enlutecida.
Pálida tristeza enjugada
en sombrío pesar resiento.


Jotabé Hijo 6

En sombrío pesar resiento,
el destiempo en su tratamiento.

Allende, el desenlace exhuma
los recuerdos que mi alma suma,
y tanto que el dolor abruma
sembrándome impotencia en ruma.

Frente a un futuro sin cabida,
nunca ella se dio por vencida.

¡Que el cielo amaine lo que siento!
Y aunque yo atesore su pluma
mi frágil corazón no olvida.


Jotabé Hijo 7

Mi frágil corazón no olvida
toda la experiencia vivida.

Con manos juntas implorando,
estruendosos truenos zumbando.
Un fúnebre viento soplando
y a la arboleda deshojando.

Y un milagro al cielo pidiera
¡Oh, Dios! ¡Por favor, que no muera!

Mientras le duraba la vida
en silencio seguía orando…
y un «¡Te quiero!» ella me dijera.


Jotabé Hijo 8

Y un «¡Te quiero!» ella me dijera
días antes de que muriera.

Aunque andaba mal de salud,
luchar siempre fue su virtud.
Siguió en pie con buena actitud
frente a cualquier vicisitud.

Con voz cálida y bendecida
siempre nos endulzó la vida.

Y cuando ya no resistiera,
plasmada quedó en su ataúd
la mustia hora de su partida.


Jotabé Hijo 9

La mustia hora de su partida
por muchos ha sido sentida.

Sufrimiento que no se agota
y que resbala gota a gota.
En pedazos el alma rota
y el duelo que el dolor denota.

Su silencio estremece al viento,
y pernocta en el pensamiento.

Honda tristeza revivida
cuando de la memoria brota
un inefable sentimiento.


Jotabé Hijo 10

Un inefable sentimiento:
con risas recordarle intento.

Y entre nubes y margaritas,
canto celestial y afroditas,
durmiendo en calmas infinitas
con su tinta y rimas escritas.

Por siempre presente y querida
nos dejó su luz encendida.

Su cariño fue su instrumento.
Sus palabras nunca prescritas.
Fue ese su último adiós en vida.


Jotabé Hijo 11

Fue ese su último adiós en vida
por todo le estoy agradecida.

En ésta acerba desventura
subió su espíritu a la altura,
y en mi memoria, su alma pura,
en su esencia se transfigura.

En la brisa…, el mar…, dónde quiera,
sentiré su amistad sincera.

En mi alma no habrá despedida,
y aunque vive en mí su locura,
sepultaron la primavera.



Sueños rotos


(Jotabé)


Todo se exalta en ésta fría noche,
la herida sangra un gélido reproche.

Errantes sentimientos fenecidos,
que perfilan vorágines latidos,
y un chisguete de amargos escondidos,
fustigando las lágrimas de olvidos.

Muere a pedazos su alma en soledad
de inhóspitos silencios sin piedad.

Pérfidos pensamientos en derroche,
un vendaval de sueños abatidos,
abrazando el desdén de la crueldad.



Miedo


(Jotabé)


El temor la acechaba noche y día
desde remoto tiempo no reía.

Tras la cuenca en sus ojos confundida,
y en su dolor inmóvil sumergida,
con esfumados sueños y rendida,
en ahogados gritos su alma herida.

Quietud silente, agónico sustento,
miedo arrogante de su pensamiento.

La esperanza por su temor perdía,
su alma yacía por la incierta vida,
y el miedo le expiraba el pocho aliento.



Amor mío


(Jotabé)


La noche está helada y pienso en ti
miro mi cama y te recuerdo allí.

Los cirios se deshojan con la brisa
y el agua se desliza en la cornisa,
así como el riachuelo lleva prisa,
amor mío mi cuerpo te precisa.

La espera con el tiempo ha sido cruel
y siempre a tu recuerdo sigo fiel.

En sueños llegas sigiloso a mí
bajo sábanas mi pudor se aprisa,
sintiendo tus caricias en mi piel.



Volemos


(Jotabé)


Evitemos caer en la rutina
y hagamos nuestra vida más divina.

Miremos el satélite lunar
con su estelar belleza luminar,
visítemos un mágico lugar
y un exótico gusto al paladar.

Subamos hasta el Salto Ángel luego
y hagamos acrobacias en el fuego.

Pasaremos en motos la marina
y nademos desnudos en el mar,
disfrutemos la vida como un juego.



Mi voluntad desmaya


(Jotabé)


En silencio camino por la playa
y con las olas que el dolor se vaya.

Contemplando el volar de la gaviota
y la ola que a la orilla llega rota,
recordando esa época remota
mis lágrimas se pierden gota a gota.

Intento distraerme y no pensarte
pero mi mente insiste en recordarte.

Tu recuerdo mi voluntad desmaya,
y aunque lo niegue la verdad denota
que nunca lograré dejar de amarte.



El mundo siempre gira


(Jotabé)


Los días pasan lentamente, mira
al mundo nada lo detiene, gira.

Se desvanece nuestra fe y confianza
y buscamos las horas de alabanza,
colocando los miedos en balanza,
el presente se escapa en lontananza.

Quizás del infortunio nada pierdes
y el pasar de los días no recuerdes,

vivimos una vida de mentira,
pero siempre aguardamos esperanza,
como la tierra se vistió de verdes.



Ensueños


(Jotabem)


Cuando susurra en mi oído,
se silencia todo el ruido.

La noche ya no es oscura,
sus besos tienen la cura,
transforma todo en locura,
con su divina dulzura.

Siempre llega muy risueño
a irrumpir sagaz mi sueño.

El vino estaba servido,
nos besamos sin censura
en una noche de ensueño.

 
     
   
     
 
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