Inesperado regreso

(Jotabé)


Camino por mis días sin sentido;
pensaba que ya todo era perdido,

Anoche por un sueño fantasioso,
soñé que regresabas amoroso.
Mi hogar resplandecía luminoso
y verte regresar fue fabuloso.

Despiértome feliz sin amargura.
Recuerdo tu sonrisa con ternura.

Mi frágil corazón, hoy no dolido,
se siente satisfecho y muy gozoso.
¡La vida me regala su hermosura!



Amigas

(Jotabem)


En las buenas, en las malas
mis abrazos serán alas.

Como amiga, protegerte,
en tus penas contenerte,
en las buenas reir, verte.
Bendecida por tenerte.

Los momentos serán gratos
olvidando malos ratos.

¡Para ti traje mandalas!
Demostrarte que quererte
borrarán días ingratos.



Ojos curiosos

(Jotabé decasílabo)


Entre las ramas de nogalitos
encuentran nidos de zorzalitos.

Cantan a coro las avecillas,
danzan al viento las florecillas,
nacen copiosas las hierbecillas.
En ronda cantan varias chiquillas.

Van por el huerto de sus casitas
entre las bellas maripositas.

Natura tiene mil regalitos.
Colman a pleno las canastillas.
Ojos curiosos ¡Tantas cositas!



¡Por cupido!

(Jotabem)


Un marido muy celoso
despertó todo furioso.

Pues soñó que su adorada
muy coqueta y desganada,
con maleta preparada
por su amante era buscada.

¡Que mal sueño, buen marido
tanta angustia sin sentido!

Bello día, sol hermoso,
que por siempre soy tu amada,
¡Te lo juro por Cupido!



Boquita de grana

(Jotabem)


Camino a los olivares
ella entona sus cantares.

Carmela guapa y gitana,
lucero de mi ventana.
¡Ay mi estrellita cercana
llévame en tu caravana!

Por tu amor, en el gentío
dejo mi andar tan sombrío.

Y siguiendo tus andares
busco tu boca de grana
como joya a mi tronío.



La vida

(Jotabem heptasílabo)


La brisa me estremece;
a mis cabellos, mece.

Mi paso por la vida
en goces o dolida,
con prudencia debida,
mi meta está cumplida.

Bebiendo primaveras
recorro mis quimeras.

La vida me apetece.
De azul hoy soy vestida
cual salvias tempraneras.



De viaje y de regreso

(Jotabé)


En esta buena y sana despedida,
no deJo mi pesar en la partida.

De todo el horizonte del paisaje,
cargo sus tesoros en mi equipaje.
No llevo mi pensar en el ropaje
ni busco cien quimeras en mi viaje.

Tan sólo me sumerjo transitando,
por viejas fantasías dormitando.

Me busco en solariega bienvenida
con ímpetu de en sueños y coraje,
de verme en tus momentos despertando.