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ARTÍCULO 316

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VAN GOGH MULTIMEDIA Y MULTISENSORIAL

 

 
 

Pocas exposiciones multimedia se pasean por todo el mundo con un éxito y aceptación arrolladora, como lo está teniendo la exposición multimedia Van Gogh Alive, que tanta gloria está cosechando en el Ateneo Mercantil de Valencia, pues, no sólo es que ha superado todas las expectativas de afluencia de visitantes, sino que la crítica ha hablado de ella con tan excelsas palabras, que si te has quedado sin ver esta exposición, te habrás quedado sin ver una exposición que ha marcado y está marcando todo un hito en este tipo de espectáculos audiovisuales.

Van Gogh Alive ha prorrogado su fecha de cierre en el Ateneo Mercantil de Valencia, prevista para el 20 de octubre de 2019, hasta el 17 de noviembre de 2019, para dar la oportunidad a todos de no quedarse sin ver una expo que, es posible que nunca se vuelva a repetir.

La concepción de esta experiencia es muy enriquecedora, pues se aparta bastante del convencionalismo habitual del visionado de un museo o de una galería de arte, al no tener ningún cuadro físico en el recinto que tener que salvaguardar con fuertes medidas de seguridad, niveles de humedad y calor controlados, y otras diversas medidas, pues en algunos casos estas son muy férreas.

Por citar un cuadro que dispone de unas medidas de seguridad bastante extremas, podríamos comentar sobre el cuadro de la Mona Lisa del reconocido genio Leonardo Da Vinci (1452-1519), que se encuentra en el Museo del Louvre, el cual, entre otras medidas de seguridad, tiene delante del mismo un vidrio a prueba de balas, que también evita que alguien lo pueda manchar, y un cordón que separa a las personas del cuadro varios metros.

Por tal motivo Van Gogh Alive, al ser prácticamente toda la expo imágenes proyectadas, ofrece un gran margen a la imaginación y la creatividad a la hora de exponer todas las bondades y virtudes de este genio de pelo rojo, sin temor a deteriorar ninguna de sus obras de arte. Esto hace que las proyecciones puedan ser de gran formato, teniendo tan sólo como límite, la amplitud de la sala donde se está viviendo la experiencia.

Es preceptivo apuntar que, algunos de los cuadros de este genio toman vida ante los ojos de los visitantes, haciendo, por ejemplo, que las aspas de algunos de los molinos de sus cuadros, cobren momento, teniendo la percepción que, incluso te surca la cara cierta brisa con aire a impresionismo.

Además, también llama la atención sobremanera dentro de esta experiencia-espectáculo audiovisual, que las imágenes no se limiten a proyectarse en las paredes haciendo mil y una combinaciones, secuencias y animaciones… sino que, incluso se proyectan en el suelo, dando una impresionante sensación de estar inmerso dentro de las obras del genial pintor holandés, el cual, tras una vida muy azarosa, conoció verdaderamente la fama y la esplendorosa gloria tras su muerte, como suele pasarle a muchos de los grandes pintores. Es, como si algunos de los grandes genios de la pintura, tuvieran que morir para poder ser reconocidos pictóricamente como tales genios.

Según los organizadores, son unas 3.000 imágenes las que deleitan la visión del visitante, el cual, llega un momento que, verdaderamente no sabe dónde mirar, pues el impacto visual es rápido y fuertemente llamativo, creando en tu cerebro y en tu corazón, una sensación de no haberlo visto todo, que te incita a volver de nuevo para completar esa experiencia de increíble colorido.

Pero esta exposición multimedia, no sólo se regocija en deleitarnos el sentido de la vista, sino que también nos deleita el sentido del oído con unas grabaciones en muy alta calidad de magnas e inmortales obras de grandes genios de la música clásica, como el, I Allegro Moderato del Concierto Romántico Op. 35 de Chlöe Hanslip (1987). El Presto, tempo impetuoso d’estate, del Concierto en g menor para violín, orquesta de cuerda y continuo, Op. 8 No. 2, Rv 315 «L’estate» de antonio Vivaldi (1678-1741), o la Sarabande de George Friederic Haendel (1685-1759), por citar algunas de las obras que han sido seleccionadas para que se mimeticen perfectamente con la obra de Vincent Willem van Gogh (1853-1890), realzando la misma en algunas ocasiones, y poniendo un magnífico contrapunto en otras ocasiones. Y, en cualquier caso, poniendo una magistral banda sonora a un magnífico espectáculo lleno de luz.

Pero, aún queda más, pues nuestro sentido del olfato, siempre uno de los olvidados en casi todos los grandes espectáculos, se hace presente en este impresionante Van Gogh Alive, haciéndonos percibir unos aromas que nos transportan a lugares exóticos donde el maestro pintó, disfrutó, padeció y vivió su ajetreada vida, una vida bohemia llena de alegría, y sobre todo de sinsabores. Una vida que lo llevó a estar internado en el hospital para enfermos mentales de Saint-Paul en Sant-Rémy (Francia), entre 1889 y 1889, y desde donde, a través de una de sus ventanas, pinto su famoso cuadro, La noche estrellada.

Una gran experiencia de esta exposición, es poder contemplar en tamaño real, la recreación en vivo de su famoso cuadro, El dormitorio en Arlés, aunque cabe hacer notar que no han mantenido las deformadas proporciones del cuadro original, haciendo que esta recreación, sea más normal que la visión que el pintor tuvo de su propia habitación, durante su estancia en la ciudad francesa de Arlés, a la que llegó en 1888.

Sea como fuere, lo cierto es que Van Gogh Alive, ha sido, es, y será, una gran experiencia multisensorial que todas aquellas personas que se hayan decidido a verla, mantendrán viva siempre en su recuerdo.

Tan sólo como anécdotas o curiosidades, comentar que Vincent van Gogh, tuvo un hermano con su mismo nombre, Vincent, que nació muerto un año antes de que él naciera. Que pintó unos treinta autorretratos entre 1886 y 1889. Que su famoso cuadro, Los girasoles, es tan sólo uno de los siete cuadros que pintó de la serie girasoles, entre 1888 y 1889, en la cual hay cuadros que tienen entre tres y catorce girasoles. Y que, no se cortó la oreja, sino tan sólo el lóbulo de la misma.
Valencia es sinónimo de cultura.

 
 
 

Fuente:
El Periódico de Aquí

 
 
 
 
     
   
 
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