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V Congreso Internacional de la Rima Jotabé



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  V Congreso Internacional Rima Jotabé



V Congreso Internacional Rima Jotabé

Ponencia de:

Ángel Raúl Morinigo Inchausti

Ángel Raúl Morinigo Inchausti
(Paraguay)

Poeta comprometido con la Rima Jotabé, hasta el punto que nunca ha compuesto en otra estructura estrófica.

Ángel Raúl Morinigo Inchausti

La Rima Jotabé y el hombre moderno

Introducción

Desde los albores de la humanidad, el Homo sapiens siempre ha buscado la mejor manera de comunicarse, siendo cazadores-recolectores, me animo a decir que plasmaron en sus cavernas, la esperanza, el anhelo, el miedo, el deseo y, la incertidumbre que representa el futuro; ya conscientes de la vida y de la muerte, dejaron en esas pinturas rupestres el universo de toda su existencia, y quizá, la misma esencia se sus almas.

Desde esos primordios días, vemos la evolución constante del hombre; ese ser pensante, racional y contemplativo, preocupado, ya no solamente en la sobrevivencia diaria, sino en develar los misterios de la naturaleza y la naturaleza misma de su propio ser, indagando sobre cuestiones teológicas, filosóficas y metafísicas; buscando el origen de su propia creación.

Así, con el perfeccionamiento del lenguaje, el dominio de la agricultura y la invención de la escritura, podemos encontrar al hombre, miles de años después, asentado en la Delta del Nilo, o en las antiguas ciudades de Mesopotamia, como Uruk, Nina y Lagash.

Precisamente, en Mesopotamia, desde la ciudad sumeria de Uruk, cuyo desenvolvimiento científico, político, religioso y cultural, fue una de la más notables de entre las civilizaciones antiguas; nos llegaría en tablillas, a través de la escritura cuneiforme, la obra épica más antigua conocida hasta hoy; «El Poema de Gilgamesh», una epopeya que narra la historia de un hombre que llegó a ser rey, cultivó una profunda amistad con quien fuera su enemigo, rechazó el amor de una diosa y, buscó, encontró y una serpiente le robó la «flor de la juventud», entendiendo así, que la eternidad, está reservada solamente a los dioses, pero su nombre se volvió eterno en la historia universal a través de la escritura.

Así, siendo Gilgamesh un personaje histórico o ficticio, en su epopeya fue elevado al estatus de héroe y, existirá para siempre a través de la literatura en la memoria colectiva de la humanidad y, toda vez que una persona lea su epopeya, renacerá de las cenizas como el ave fénix para caminar una vez más, por esa fértil tierra que llamamos mente.

Pero, ¿quién fue el escriba o el poeta que escribió este poema? desconozco; su nombre quedará escondido en la penumbra del tiempo; otros poetas de la antigüedad gozaron de mejor fortuna, sus obras se volvieron tesoros de la humanidad; tal es el caso de los poetas griegos y romanos como; Homero, Hesíodo, Píndaro, Catulo, Virgilio, Horacio, solo por citar a algunos, a cuyas obras nos referimos como; literatura clásica.


La literatura clásica

La literatura clásica supone un punto de inflexión en la evolución de la cosmovisión del hombre (El término «literatura clásica» surge durante el período del Renacimiento, cuyo apogeo fue en el siglo XV, para referirse a la literatura, artes y pensamientos, e ideas en general anteriores a la tenebrosa Edad Media).

Los filósofos presocráticos como:

Tales de Mileto (624-548 a.C).
Anaximandro de Mileto (610-547 a.C).
Pitágoras de Samos (570-495 a.C).
Heráclito de Éfeso (535-475 a.C)
Parménides de Elea (515-450 a.C)


Extrapolaron las ideas canónicas y brindaron al hombre, una manera racional y sistemática de entender el mundo y la naturaleza, basada en la razón y la observación directa de la realidad.

Las supersticiones y creencias religiosas ya no eran la base para explicar la realidad.


Las bellas artes

Pero las bellas artes tienen sus propias realidades, sus propios multiversos creados por pequeños y efímeros dioses de barro; no están regidas por la razón, pues no se trata de un conocimiento científico, pero es de igual importancia, pertenecen al ámbito de la emoción, de la sensibilidad, de la imaginación, es la parte sustancial del alma que transforma lo abstracto en un puente, para el entendimiento y la integración entre los hombres a través de las expresiones artistas.


La poesía

De entre las bellas artes; poesía, música, pintura, escultura y arquitectura, la poesía ocupa un lugar preponderante, aun teniendo todas ellas, como principal fin, la manifestación de la belleza.

Decía al respecto el poeta, cuentista, periodista y pedagogo español, Don Narciso Campillo y Correa (1834-1900):

«Tiene la poesía espacio, formas, perspectivas, colores, sonidos, movimientos, instantes sucesivos, pasiones... en suma, lo tiene todo, porque dispone de la palabra, donde se cifra y comprende todo cuanto existe en el mundo de los hechos, en el mundo de la razón y en el mundo de la fantasía».

Además, la poesía crea un vínculo directo con la naturaleza misma del hombre y entre los hombres, con esa esencia perenne y misteriosa que llamamos alma, cuyo universal lenguaje se manifiesta a través de los sentimientos.


La Rima Jotabé

Podemos decir, sin temor a equivocarnos, que la poesía jamás ha sido tan desvalorizada por la sociedad, como en el moderno siglo XXI (aunque Platón, alguna vez propuso desterrar a todos los poetas atenienses), jamás la civilización se ha asomado tanto al abismo de la mediocridad colectiva, como en esta era digital, era de la información, de la comunicación, del conocimiento (y, diría, de la soledad).

Por ventura, la poesía siempre encuentra un sendero para seguir evolucionando, para seguir sosteniendo al hombre ante la complejidad de su existencia, pues, aún, en la más oscura de las mazmorras, la poesía brinda belleza, luz y esperanza al hombre que navega en sus aguas.

Así, en pleno siglo XXI, la poesía evolucionó una vez más y, con una nueva estructura estrófica, sin perder su esencia clásica, se presenta en el año 2009, ante la comunidad poética mundial, de la mano de su creador, el Insigne poeta y dramaturgo español, Don Juan Benito Rodríguez Manzanares; la llamó… Rima Jotabé y la definió como sigue:

«La Rima Jotabé es una manera neoclásica de componer poemas estróficos para enaltecer aún más, si cabe, el mundo de la poesía en el ámbito de la poética mundial».

No me voy a dilatar con explicaciones técnicas sobre la Rima Jotabé, pues, todo cuanto hace a ese menester pueden encontrarlo en la «Documentación Formal de composición de poemas en Rima Jotabé», disponible gratuitamente en la web.

Con la irrupción de la Rima Jotabé en el mundo y la aceptación en la comunidad poética mundial, cobra nuevo brío en plena era digital, la composición de poemas estróficos; muchos poetas y de todo el mundo, prontamente adoptaron la Rima Jotabé y empezaron a escribir sus poemas con esta novedosa estructura neoclásica, comenzando así, el rescate de la composición de poemas estróficos; el ritmo, la métrica, la rima y todo cuanto hace a las directrices de la preceptiva poética mundial, encontraron una nueva tierra para asentarse después de un largo destierro; la fértil y soleada tierra de la Rima Jotabé.


La Rima Jotabé en la sociedad actual

En la sociedad actual, globalizada, desigual y vertiginosamente caótica, la Rima Jotabé está llamada a cumplir un rol fundamental, el cual es el de reconectar al hombre con la naturaleza, con la belleza de las formas, la armonía, la sensibilidad, la simetría y la sublimidad de los sentimientos, que, en su conjunto, solamente la poesía puede transmitir.

Es un hecho que el hombre moderno, a pesar de vivir en la era de la comunicación, está cada vez más aislado; la salud mental debilitada por múltiples factores, tales cómo; el estrés, la soledad, la tristeza, la depresión, el vacío existencial, la desilusión, etc. Todas estas patologías pueden ser atenuadas a través de la poesía, ya sea leyendo o componiendo; ¡cuantos de nosotros visitaríamos menos al psicólogo, acudiendo de vez en cuando al terapéutico mundo de la poesía!

En ese sentido, la Rima Jotabé ofrece un oasis sereno y florido donde descansar la mente, una fuente cristalina donde beber humanidad; humanidad pura, libre de los vicios de la intolerancia y abre una ventana para otear el mundo de los sueños, ese mundo misterioso donde navega el alma con absoluta libertad y, donde el corazón late con la esencia primigenia de su existencia; el amor.

No es posible construir una sociedad saludable sin poesía, no es posible fortalecer la cultura sin poesía, por sobre todas las cosas, no es posible vivir sin poesía, es por ello que en este mundo, cada vez más oscuro, cada vez más fragmentado, donde reina la intolerancia, la miseria y el desorden, la Rima Jotabé lleva una luz de esperanza en cada poema para iluminar a todas aquellas personas que de alguna manera buscan el amor para ser feliz, la armonía para tener paz, la belleza para deleitar el alma y la sensibilidad para entender que la empatía para con el semejante, es amarse a uno mismo.

Por último, quiero compartir con ustedes un poema de mi autoría dedicado a la Rima Jotabé.


Dulce Rima Jotabé

(Jotabea)


¡Oh! Rima Jotabé, crisol del alma mía,
En ti yo me derramo… para ser poesía.

La luz de tu hermosura brilla en el firmamento,
es rima que fulgura como vanguardia acento;
en ti yo vivo y sueño volando con el viento,
voy sembrando utopía de puro sentimiento.

Por el mundo los bardos pregonan tu dulzura,
la perenne belleza de la nueva estructura.

Tu ánfora guarda, vida, tiempo, amor y alegría,
y en sacra sinfonía vistes el nacimiento…
de una nueva variante que emprende la aventura.


Y le digo más a la Rima Jotabé, con estos versos del príncipe de la lira.

«La que el Hado potente
encendió, leve chispa,
en mi pecho, no hay riesgo
que los años extingan».

Píndaro.

Muchas gracias.
Ángel inchausti, poeta jotabero de Paraguay.

Cartel anunciador del V Congreso Internacional de la Rima Jotabé

 
     
   
     
 
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